Seguro que estarás de acuerdo conmigo en que llevar un pequeño negocio de venta de productos o servicios de retail es una tarea compleja. Nos solidarizamos contigo por los problemas a los que te enfrentas y aplaudimos tu esfuerzo, sobre todo con la pandemia. Sin embargo, atender a tus clientes, cobrarles y lograr su satisfacción nunca debería ser difícil.
La forma de realizar todas estas tareas está cambiando actualmente como consecuencia de la transformación radical de la demanda, los hábitos y las actitudes de los consumidores provocada por la COVID-19. La pandemia ha transformado nuestra forma de comprar, evolucionando de la visita al establecimiento para mirar y elegir los productos al click and collect, que permite realizar el pedido con antelación y recogerlo rápidamente. Además, como todos hemos podido experimentar tanto en nuestro ámbito profesional como personal, ahora compramos mucho más online para que nos envíen los productos a casa.
Está claro que, en el futuro, los negocios de retail más exitosos serán los que consigan simplificar sus procesos y su accesibilidad, no solo para sus clientes sino también para sus trabajadores. El sector de retail trabaja ahora con un conjunto de reglas y límites que cambia con rapidez, por lo que la única forma de no quedarse atrás es dejando que sea la tecnología la que se ocupe de aliviar esta presión.
Esto puede parecer abrumador, sobre todo si tu negocio es una empresa de retail pequeña que lleva años, quizá décadas, utilizando con éxito procesos manuales. Sin embargo, no tiene porqué ser tan complejo como parece.